Qué es el Algodoncillo

Hola amigos de Bibi Tips, los saluda afectuosamente su amiga Bertha Avila PietraSanta quien les agradece nuevamente sus mails y opiniones. El día de hoy hablaremos sobre el “algodoncillo”, o “candiasis” que es una enfermedad bucal que se presenta principalmente en niños menores de tres años, y, en particular, en los lactantes, causada por un hongo. Se caracteriza por la presencia de lesiones blanquecinas en la superficie de la cavidad oral. Se le define como una infección que afecta labios, lengua, encías, paredes de la boca y garganta, y cuya manifestación visible son pequeñas manchas circulares, de color blanquecino —de allí el nombre de algodoncillo—, con los bordes rojizos y de aspecto "pegajoso". Algunos informantes lo describen como granos, fuegos, erupciones o llagas con agua. La aparición del algodoncillo se atribuye a la falta de higiene, ya sea de los niños que "se meten cosas sucias a la boca", o de la madre, cuando no se asea el pecho antes de amamantarlo. Otra causa importante es el calor, ya sea que el niño padezca fiebre o bien que la madre se lo transmita en la lactancia, sobre todo si ha ingerido en exceso alimentos de calientes. 

Se atribuyen también éstas infecciones que afectan a la boca y las encías, al consumo de antibióticos como la penicilina por parte de la madre, o a los efectos de un enfriamiento. Con menor frecuencia se dice que el algodoncillo se acompaña con fiebre, dolor al comer e inapetencia. La zona afectada se vuelve muy sensible a la sal y a los alimentos irritantes, como el chile. En ocasiones, el paciente tiene sangrado bucal, babea y defeca heces de color amarillento; muestra malestar general y, eventualmente, tiene diarrea y vómito. En los pocos casos realmente severos, el niño puede dejar de comer o de mamar, y pudiera morir. La terapéutica es básicamente local, y consiste en el lavado o en la aplicación de toques en las zonas afectadas de preparados de plantas, así como otras sustancias y mezclas que se prescriben hasta que desaparece la infección. Los vegetales empleados varían en las diferentes regiones del país: en el Estado de México, se hacen enjuagues bucales y lavados o se aplican fomentos con una infusión de diente de león; las frutillas o las hojas de perlilla se colocan sobre la región afectada. En Oaxaca, el látex del piñón se aplica en forma de toques, y se usa el ciruelo o el capulín para enjuagues bucales. En Puebla, también se administra localmente la hierba del ángel. En Veracruz, se aplica en la boca tomate asado, o se le unta al niño en la boca y en la lengua el aceite de ajonjolí, o la flor de la chinina frotada en el interior de la boca. En Campeche, Yucatán, Quintana Roo, Puebla y Tabasco, destaca el uso de la miel de colmena natural en diferentes mezclas de carbonato con limón. También en Puebla se hacen enjuagues bucales con agua salada o se limpia la boca con tomate asado y tizne de comal; y en Baja California se dan toques de glicerina líquida. Dos ejemplos notablemente diferentes aparecen, por un lado, en poblaciones de Morelos, en donde se aplica pomada de Micostatín que es un tratamiento alópata anti hongos en las zonas afectadas. Como siempre, es bueno consultar con su médico pediatra y preguntar cuál tratamiento podría ser apropiado para sus pequeños.

Hasta aquí con los Bibi Tips del día de hoy, se despide con cariño su amiga Bertha Avila PietraSanta, esperándolos el día de mañana con otro artículo. ¡Hasta la vista!!!!!